¿Qué son las llagas por presión?
— Las llagas por presión son zonas de la piel y del tejido de debajo de la piel que presentan daños causados por presión. Esto puede suceder por estar sentado o recostado en la misma posición durante mucho tiempo. Estos tipos de daños también suelen llamarse "úlceras por presión" y "escaras". Con frecuencia, los médicos usan el término "lesiones de presión".
Los lugares más comunes donde aparecen las llagas por presión son aquellos donde el hueso está cerca de la piel, por ejemplo, los tobillos, la espalda, los codos, los talones y las caderas.
¿Cómo son las llagas por presión?
— Al principio, la llaga aparece como una zona enrojecida en la piel. Si empeora, la piel se lastima y la llaga se convierte en un cráter poco profundo de color rojizo o rosado.
Algunas llagas son como ampollas y pueden explotar. Algunas llagas por presión graves son tan profundas que se puede ver el músculo o el hueso. En las llagas profundas también pueden formarse costras.
¿Quiénes corren riesgo de sufrir llagas por presión? — Las llagas por presión son más comunes en las personas que:
● Son mayores
● No se pueden mover o desplazar fácilmente por un problema de salud
● Están en un hospital u hogar de ancianos
¿Las llagas por presión se pueden prevenir?
— Sí. Hay algunas medidas que puede tomar para prevenir la aparición de llagas por presión.
Si pasa mucho tiempo en la cama, puede disminuir las posibilidades de sufrir llagas por presión al hacer lo siguiente:
● Cambie de posición al menos cada dos horas (por ejemplo, pase de estar apoyado sobre la espalda a apoyarse sobre un lado y luego cambie de lado).
● Cuando esté recostado de lado, eleve la parte superior de su cuerpo de manera que forme un pequeño ángulo. De esta manera, ejercerá menos presión sobre la cadera.
● Coloque almohadas o tacos de espuma entre los tobillos y las rodillas. También puede colocar almohadas o tacos de espuma debajo de los tobillos.
Una colchoneta o almohadilla especial para colocar sobre el colchón también puede resultar útil. Estas colchonetas o almohadillas pueden ser de gel, espuma, aire o agua. También existen dispositivos especiales que ajustan automáticamente la superficie para ayudar a disminuir la presión al estar recostado.
Si pasa mucho tiempo en una silla o está en silla de ruedas, puede disminuir las posibilidades de llagas por presión al hacer lo siguiente:
● Haga “flexiones” en la silla usando los brazos para elevarse del asiento. Trate de hacerlo al menos una vez por hora.
● Incline el cuerpo hacia adelante o hacia un costado para levantar los muslos del asiento al menos una vez por hora.
● Use un almohadón especial de aire, gel o espuma para el asiento.
Para prevenir llagas por presión, también es importante cuidar bien la piel. Para mantener la piel lo más saludable posible, debe hacer lo siguiente:
● Observe su piel periódicamente para ver si hay signos de llagas por presión.
● Pídale a otra persona que revise las zonas que usted no llegue a ver.
● Lávese la piel regularmente con un jabón suave.
● Evite usar agua caliente para lavarse la piel.
● Use crema humectante para evitar que la piel se reseque y descame.
¿Debo consultar a un médico o enfermero?
— Consulte a su médico o enfermero de inmediato si observa o siente que alguna zona de la superficie de la piel está lastimada.
¿Cómo se tratan las llagas por presión?
— El médico o enfermero le dará una medicina para aliviar el dolor y tratar la infección que pueda haber. También puede darle vendas especiales para que las llagas sanen más rápido.
Algunas personas deben someterse a cirugías u otros tratamientos para extirpar los tejidos infectados o muertos de las llagas.
Su médico o enfermero también puede hablarle sobre los problemas que pueden haber sido la causa de su llaga por presión, y es posible que le sugiera algunos cambios para prevenir la aparición de más llagas.

